Historias de 7 Vehículos Legendarios de Brasil

Investigación y edición: Francisco Mejía-Azcárate - Joinville, Brasil
Todos sabemos que existen pocos países en el mundo cuyos habitantes se sientan más orgullosos de su tierra y de sus logros, que los brasileños. Y son precisamente logros en ingeniería y diseño automotriz los que hacen la base de esta historia. A medida que el mercado brasileño empezó a expandirse exponencialmente a finales del siglo XX y a comienzos del siglo XXI, los fabricantes automotrices del gran país suramericano produjeron algunas joyas que bien vale la pena conocer, admirar y disfrutar. Algunas de ellas eran verdaderamente exclusivas debido a las severas políticas que restringían las importaciones y otras eran versiones adaptadas de sus homólogos extranjeros. Sin embargo, todos los vehículos de este listado, son considerados legendarios en Brasil y generan un gran de respeto en la escena del automóvil brasileño. 

1. Chevrolet Opala / Opala Caravan: 

Esta fue la adaptación que General Motors-Brasil hizo de un sedán familiar de tamaño mediano, categorizado como de turismo, del segmento E, derivado de los modelos alemanes Opel Rekord y Opel Commodore, que fueran fabricados desde 1968 hasta 1992 y producidos bajo la insignia del corbatín. Fue presentado durante el Sexto Salón del Automóvil de São Paulo, el 23 de noviembre de 1968. Se le considera como uno de los mejores carros jamás fabricados en suelo brasileño y genera una verdadera veneración de parte de sus miles de aficionados. Se fabricó con dos motores diferentes, un ‘Iron Duke’ de 4 cilindros en línea, de 2.5L y otro de 4.1L y 6 cilindros en línea, que resultó ser muy importante, ambos derivados de los estadounidenses Chevrolet Nova y Chevrolet Impala, respectivamente. Deduzco que el nombre Opala pueda ser un acrónimo de Opel-Impala. 

Panorámica que ilustra todos los modelos del Chevrolet Opala y el Caravan
Para mediados de 1975 es presentado el Opala Comodoro. Un modelo lujoso que presentaba un mejor acabado, con capota o techo revestido en vinilo, apliques de jacarandá en el panel de instrumentos, radio y reloj, además de la opción de dirección asistida y neumáticos más grandes. Chevrolet también ofreció una versión afinada del motor de seis cilindros en línea que permitía un mejor desempeño, la cual fue denominada SS (Super Sport). En su momento era el automóvil más rápido fabricado en Brasil, superando al Ford Maverick, que venía con un poderoso motor V-8 de 5.0L. Más tarde Chevrolet también presentó una carriola (station wagon) llamada “Caravan”, a la que le hicieron una versión deportiva SS. Competitivamente tuvo una carrera muy exitosa en el automovilismo, ganando 15 títulos brasileños, bajo la modalidad de ‘stock car’, además de múltiples títulos en carreras de rally y otras competencias de resistencia.

Chevrolet Opala SS, modelo 1975 

Para Mario Navarro, quien expuso una serie de obras sobre el simbolismo del miedo en la 27ª Bienal de São Paulo de 2006, los Chevrolet Opala, eran en Chile y en Brasil sinónimo de terror en la década de 1980, pues en ambos países eran utilizados por la policía política para secuestrar, torturar y hacer desaparecer personas. 

Mario Navarro - 27ª Bienal de São Paulo, 2006

2. Volkswagen Gol Gti:

Este automóvil procedente de la planta de Volkswagen en São Bernardo do Campo, Brasil, es considerado la leyenda brasileña de los hatchback. Nació en 1980 para reemplazar al modelo Brasilia, que a su vez había reemplazado al Escarabajo. Estaba disponible en los modelos ‘hatchback’ de tres puertas, sedán de cuatro puertas y camioneta (pick-up). 

Volkswagen Gol Gti, modelo 1990

En 1989, el Gol, fue el primer automóvil con inyección electrónica fabricado en Brasil. Su conducción era maravillosa y tenía un desempeño extraordinario para ser un automóvil de la década de 1980. Aceleraba de 0-100 Km/h, en 9.6 segundos y alcanzaba una velocidad máxima de 185 Km/h. Era bastante sólido para ser solo un auto con un pequeño motor de 4 cilindros en línea, con un desplazamiento de 2.0L y una carrocería con la aerodinámica de un ladrillo. Inclusive en la actualidad (2017), muchos entusiastas adquieren estos venerados ‘ladrillitos’ y los modifican hasta llevarlos a los 500 BHP. Otra de sus características principales fue la gran confiabilidad de su motor, eso sin dejar a un lado los elegantes rines Orbital y los faros de rally. 

3. Volkswagen Escarabajo (Fusca)

Si estamos resaltando los automóviles legendarios e icónicos de Brasil, es muy difícil dejar por fuera de la lista al Volkswagen Escarabajo (Fusca como se le llama en Brasil). Recordemos que se ensambló en Brasil, con partes alemanas desde 1950 y se fabricó con más del 95% de sus partes de origen brasilero, desde 1959 hasta 1986, cuando “Volkswagen do Brasil” decidió retirar al Fusca del mercado, argumentando que era un modelo obsoleto, a pesar de ser el segundo automóvil más vendido en aquel entonces, justo detrás del Chevrolet Monza. Fue un carro tan inmensamente popular que se dice que hay Escarabajos presentes en la historia de casi todas las familias de Brasil, porque ya fuera un abuelo, un tío o algún pariente lejano, alguien de la familia siempre tenía un ‘Fusca’. Hubo un espacio de tiempo (hiato) entre 1986 y 1993, en que el Escarabajo no se produjo más en Brasil, pero eso cambió cuando en 1993, por sugerencia del entonces Presidente de la República Federal de Brasil, Itamar Franco, la empresa volvió a fabricar este modelo. Itamar Franco quería dar impulso a la fabricación de automóviles populares y sugirió que Brasil requería de un automóvil como el Fusca. Entonces fue aprobada la “Ley del Automóvil Popular”, que contemplaba exenciones y disminuciones de impuestos para automóviles con motores con desplazamiento de 1.0 L. El Fusca y el Chevrolet Chevette, aunque tenían motores de 1.6 L, fueron igualmente incluidos. El auto se vendió bien, aunque todavía estaba lejos de alcanzar las metas planteadas por Volkswagen. 

Volkswagen Escarabajo 1.600 cc (Fusca Itamar-"Série Ouro"), modelo 1996
En 1996, la empresa suspendió nuevamente la producción del Fusca, esta vez de manera definitiva, con una edición limitada llamada "Série Ouro". A partir de entonces, el Volkswagen Escarabajo, sería producido exclusivamente en México, donde se fabricó hasta 2003. En este segundo periodo, fueron producidas en Brasil aproximadamente 42.000 unidades (Wikipedia). Esa es la razón por lo que a los Escarabajos fabricados durante ese periodo de tiempo se les conozca en Brasil como “Fusca Itamar”.

4. Brasinca 4200 GT / Uirapuru

Este es uno de los mejores autos deportivos jamás fabricados en Brasil. Creado por un caballero español catalán, llamado Rigobert Soler Gisbert y el mago brasileño de la mecánica Ângelo Mário Gonçalves. La historia cuenta que Soler Gisbert, entró en el negocio del diseño automotriz en Vemag, fabricante de la famosa DKW, en la que diseñó el prototipo de una camioneta utilitaria derivada de la DKW Fissore. Más tarde se enroló en Willys-Overland de Brasil, que en ese momento empezaba a trabajar en el desarrollo de un auto deportivo de mayor rendimiento que el modelo ‘Interlagos’, utilizando un motor de seis cilindros en línea y 2.6 L proveniente del Aero-Willys. El nombre escogido para este nuevo modelo fue Capeta - incluso algunas de sus líneas tenían un pequeño parecido con el futuro ‘Uirapuru’ – y el prototipo se presentó en el IV Salón del Automóvil de Sao Pablo en 1964, pero nunca entró en producción. Soler Gisbert dejó la Willys-Overland y se unió al Brasinca S.A., como nuevo jefe del Departamento de Ingeniería de Producto, con la misión de diseñar y producir un coupé de gran cilindrada y alto rendimiento, algo que todavía era desconocido en la industria nacional Brasilera. 

Brasinca 4200 GT / Uirapuru, modelo 1965
Una vez en Brasinca comentó a los directivos lo que venía haciendo en la maltrecha Willys-Overland, así que la compañía brasilera, que además de las carrocerías de acero prensado, venía fabricando carrocerías de fibra de vidrio desde 1951, se interesó en el proyecto con la intención de sacarlo adelante. 

Fábrica Brasinca, fotografía tomada en 1966
Cuando el proyecto cambió de manos, también cambió el nombre (Capeta) a Uirapuru, nombre este que proviene de un hermoso pájaro amazónico. Contaba con un motor de camión Chevrolet, de 6 cilindros en línea, con un desplazamiento de 4.27 L, que era capaz de generar 155 HP y alcanzar los 200 km/h. Para alimentar el motor fueron utilizados 3 carburadores ingleses SU. 

Brasinca 4200 GT / Uirapuru, modelo 1965
Pronto hubo versiones de competencia del Uirapuru 4200 GT S, con neumáticos más anchos, frenos de disco y un motor que generaba 171 HP, que alcanzaba una velocidad máxima de 230 km/h, acoplado a una transmisión de cuatro velocidades proveniente del Chevrolet Corvette. En el V Salón del Automóvil de Sao Pablo en 1966, el modelo de calle apareció con faros rectangulares y un motor de 162 HP, junto con dos versiones especiales: un convertible y una carriola (station wagon) blindada llamada Gavilán. Al final, solo se produjeron 73 automóviles entre 1964 y 1966. De estos 70 fueron modelo Berlineta, dos convertibles y la carriola Gavilán ya mencionada, que proporcionó servicios a la policía de carreteras en la autopista Anchieta. Detrás de la construcción de este modelo existía la intención de mostrarles a los brasileños y al mundo la capacidad industrial que en ese momento tenían; sin lugar a dudas fue el primer automóvil brasileño diseñado con la aerodinámica, como una preocupación medular e incluso fue probado en un túnel de viento, algo con lo que solo los más sofisticados fabricantes apenas experimentaban. 

Interior del Brasinca 4200 GT / Uirapuru, modelo 1965
Comparación obligada del Jensen Interceptor (arriba) y el Uirapuru (abajo)

Siempre existió una controversia por la similitud entre el Uirapuru, el Jensen Interceptor e inclusive el Studebaker Avanti. Lleguen Ustedes sus propias conclusiones... 

5. Volkswagen SP2

La filial de Volkswagen en Brasil siempre tuvo algún grado de independencia de la casa matriz en Wolfsburg, Alemania, razón por la cual en 1969 decidieron iniciar un nuevo proyecto propio. Un equipo dirigido conjuntamente por el diseñador brasileño Marcio Piancastelli (1936-2015) y un Sr. Schiemann, apoyados decididamente por Rudolf Leiding (el CEO de la filial y más tarde de toda la empresa) comenzó a trabajar en el "Proyecto X", presentando un prototipo en 1971. 

Volkswagen SP2, modelo 1975

Les tomaría un año completar el desarrollo para que el carro llegara a las calles. Recordemos que durante la dictadura militar (1964-1985), el mercado brasileño estuvo cerrado a las importaciones y el único automóvil deportivo oficialmente fabricado en Brasil por las automotrices internacionales era el ya envejecido Volkswagen Karmann Ghia, con su fracasado sucesor Karmann Ghia TC. 

Tablero de mandos del Volkswagen SP2, modelo 1972
Sólo los fabricantes independientes de automóviles fueron capaces de llenar la brecha, especialmente Puma, Santa Matilde y Miura. El Volkswagen SP2, no era para nada un auto veloz, es más, jocosamente se le denominaba ‘una oveja con piel de lobo’, aunque innegablemente fue quizás el más hermoso auto deportivo de la época. Fue diseñado para satisfacer la necesidad de un auto deportivo nacional, pero su motor no le ayudaba, ya que estaba basado en el muy confiable pero lento motor del Escarabajo, ese mismo de 4 cilindros, refrigerado por aire, que solo generaba 75 HP, haciéndolo dolorosamente inexpresivo, sin embargo, con ese aspecto, ¿por qué alguien querría velocidad después de todo? Se fabricaron 11.123 unidades entre 1972 y 1976. 

Vista lateral del Volkswagen SP2, modelo 1976
Nota 1: El Santa Matilde o SM4.1, fue un auto deportivo diseñado y producido en Brasil por la Compañía Industrial de Santa Matilde entre 1977 y 1997.

Nota 2: Miura fue una marca de automóviles de Brasil, creada por Besson, Gobbi S / A. Fue fundada en 1976 y disuelta en 1992, cuando se dio la apertura del mercado interno a los vehículos importados). 

6. Puma GTE

Puma fue un fabricante brasileño de automóviles deportivos y camionetas, que existió entre 1967 y 1995. La historia nos cuenta que el anuncio del fin de DKW-Vemag en 1967, después de que la marca fuera absorbida por Volkswagen, convirtió al alma del nuevo Puma GT DKW en un fantasma. Volkswagen pudo haber abandonado a Puma, pero por alguna razón, decidió seguir proveyéndola de partes. El éxito de los primeros modelos Puma GT DKW propició el camino para los nuevos Pumas y la necesidad de crear una nueva base para este deportivo dio lugar a un auto completamente nuevo y la solución se dio cuando lo montaron sobre el chasis de un Karmann Ghia, acortado en 25 centímetros. 

Puma GTE, modelo 1974

El Puma GTE, que fuera producido entre 1970 y 1980, tenía carrocería de fibra de vidrio y la consabida mecánica Volkswagen, con su eterno y confiable motor boxer de 1.5L, refrigerado por aire y localizado atrás, al que se le adaptó un escape deportivo y un carburador adicional. Estas modificaciones le dieron una potencia de 60 HP y una velocidad máxima de ​​150 km/h. "En Brasil, el Puma tuvo motor con doble carburador antes que los autos Volkswagen" dijo alguna vez Felipe Nicoliello, presidente del Club de autos Puma. A partir de 1969, se ofreció con motor Volkswagen de 1.6L. El nuevo diseño se mantuvo fiel a la escuela italiana y mientras que el Puma GT DKW se parecía más a un Ferrari, el nuevo GTE, tenía una clara influencia del Lamborghini Miura, añadiéndosele la letra "E" a la nomenclatura, lo que significaba "Exportación" o según otras fuentes "Europa". La fábrica quedaba dentro de una granja en Matão, Sao Paulo y mientras que la producción estaba a cargo del ingeniero Jorge Lettry, la distribución la hacía su socio y amigo Genaro "Rino" Malzoni, quien además de venderlo en Brasil, logró exportarlo a Uruguay (primer vehículo exportado), Argentina, Haití, Guatemala, Nicaragua, El Salvador, Estados Unidos, Sudáfrica (donde se producía localmente); también lo vendieron en Japón, Italia, Grecia, Alemania y Oriente Medio. En 1976, se dio el primer cambio importante. El Puma GTE ahora estaba cimentado sobre el chasis del Volkswagen Brasilia, adicionalmente se le implementaron frenos de disco en las ruedas delanteras y también le fueron modificados los ‘stops’ o luces traseras.

Puma GTE, modelo 1976
Tanto los modelos anteriores GT, como los modelos posteriores GTE fueron conocidos como "Tiburón Puma", porque las entradas de aire en el motor se asemejaban a las branquias de un tiburón. El GTE fue el modelo de mayor producción de Puma, un total de 8.705 unidades fueron fabricadas.

Puma GTE, modelo 1979
La historia de este modelo es muy similar a la del Volkswagen SP2. Fue sin duda un diseño precioso, pero absolutamente lento, significaba que era únicamente puro estilo y nada de malicia; debido a este ‘hándicap’ surgieron varios ‘Kits Puma’ con diferentes comandos y relaciones de transmisión de válvulas, de pistón y conjuntos de cilindros que convertían el motor de 1.6L, en uno mucho más brioso de 2.1L. Según Nicoliello, se estima que estos ‘Kits Puma’ le podían aumentar la potencia a los motores entre 80 y 90 HP, convirtiéndolos en aguerridos competidores en las diferentes carreras y circuitos existentes en Brasil e inclusive en Argentina, dado su diseño ágil y aerodinámico que lo hacía muy estable y sereno a altas velocidades. Se dice que el tres veces campeón de Fórmula 1, Nelson Piquet y algunos de sus amigos compraron varios de ellos y les instalaron motores BMW de Fórmula 1, de 600 HP, convirtiéndolos en unas bestias absolutas. 

7. Fiat 147

Fue el primer vehículo de la marca Fiat producido en Brasil, marcando el inicio de las operaciones, el 9 de julio de 1976, en la localidad de Betim - Minas Gerais. Este pequeño, amistoso e italianísimo autito fue un hatchback de dos volúmenes y tres puertas, construido específicamente para los clientes brasileños desde 1976 hasta 1986. Su modelo se derivó del Fiat 127 europeo, con nuevos interiores y un exterior reformado.

Bosquejo del Fiat 147, modelo 1976
La primera barrera con la que se encontró el Fiat 147 fue como hacer para impulsar sus ventas demostrando que a pesar de su reducido tamaño ofrecía un buen espacio interior. Casi como un truco de magia, Fiat logró organizar la disposición interior del vehículo colocando la dirección (volante) en una posición más vertical que en los otros vehículos y los pisos traseros en ángulos más adecuados, liberando espacio. Fue uno de los primeros modelos producidos en Suramérica con motor delantero transversal, también fue el primer carro producido en Brasil con la columna de dirección articulada. El motor fue desarrollado por el antiguo ingeniero de Ferrari, Aurelio Lampredi y tenía la capacidad de ser altamente modificable, tanto así que algunos entusiastas los equipaban con turbo y no siempre con la idea de competir, simplemente para hacerlos más dinámicos y posiblemente para presumir en algún semáforo, luego de una luz roja. 

Fiat 147 Rallye, modelo 1978
Una vez modificados con turbo, su potencia podía llegar alrededor de 200 HP y como tan solo pesaba 796 kilos, lo convertía en un pequeño ‘cohete’. Fue ampliamente utilizado en las carreras de rally y podía mantenerse al ‘ritmo’ de los autos más grandes, como el Dodge Dart y el Ford Maverick, por carreteras tortuosas. Con solo un año en el mercado, el Fiat 147, se ubicó en el sexto puesto de ventas en Brasil durante 1977, con 62.782 unidades vendidas, pero en 1978 subió al podio con 92.331 unidades vendidas y permaneció en él durante todo 1979, cuando puso en el mercado 108.111 unidades. El Fiat 147 pasó la marca de las 10.000 unidades vendidas al mes por primera vez en julio de 1979, cuando logró colocar en el mercado brasilero 10.924 unidades.

Fotografía del interior de un Fiat 147 Rallye, modelo 1978
Este fue definitivamente un modelo pionero en muchas áreas; además de las mencionadas anteriormente el Fiat 147, se destacó por:

- En 1979, se convirtió en el primer carro del mundo, fabricado en serie, con un motor diseñado para funcionar con alcohol 100%.
- Fue el automóvil más pequeño del mundo, fabricado en serie, con motor Diesel. Ese modelo Diesel se vendió mayoritariamente en Europa y Argentina.
- Fue el primer carro brasileño con carrocería en todas estas "versiones": hatchback, sedán, carro, carriola y camioneta (pick-up), faltaron solo las versiones convertible y utilitario deportivo.

Camioneta (pick-up) Fiat 147, modelo 1979
- Fue el primer carro brasileño con el neumático de repuesto dentro del compartimiento del motor o bajo el capó delantero.
- Fue el primer carro fabricado en Brasil en utilizar los bumpers fabricados en polipropileno a partir de 1980.
- Fue el primer carro brasilero con desempañador para el vidrio trasero.