Historia del Corvette Italia Scaglietti Coupe modelo de 1959

Por: Francisco Mejía-Azcárate
Cali, Colombia – Agosto 2013
Escudo del Corvette Italia Scaglietti Coupe, 1959
A raíz de una agradable y emocionante conversación que sostuve con el extraordinario carrocero ecuatoriano Luis Nájera, a quien conocí recientemente en Cali, con ocasión de la visita de los socios del Club de Autos Antiguos y Clásicos del Ecuador Clasec, quienes se detuvieron en esta ciudad durante la realización del “1er Raid Internacional 1/2 Mitad del Mundo - Eje Cafetero”, en el que cada uno de los asociados al Obelisco Classic Car Club de Cali, Colombia OCCCCC nos convertimos en anfitriones, supe de la existencia del Corvette Italia Scaglietti Coupé de 1959. La fascinante y compleja historia del vehículo comenzó cuando Gary Laughlin, un rico petrolero texano y piloto de carreras, rompió el cigüeñal de su Ferrari Monza. Como la mayoría de las reparaciones de Ferrari, esta no iba a ser una reparación simple o barata. Para esa época Laughlin era un activo participante en el entorno fulgurante de las carreras de autos deportivos en los Estados Unidos y amigo muy cercano de otro famoso corredor texano, el emblemático Carroll Shelby. Los dos habían sido testigos cotidianos de múltiples triunfos obtenidos con motores V-8 americanos, especialmente acondicionados, sobre los sofisticados motores europeos, los cuales tenían una mecánica muy compleja para la época.

Motor de Corvette
Es de allí de donde nació la idea de desarrollar y fabricar un carro de doble propósito, basado en la sólida y confiable mecánica del Chevrolet Corvette y una liviana carrocería en aleación de aluminio al estilo europeo, para así poder tener lo mejor de los dos mundos y con ello vencer a Ferrari en el escenario europeo. Para tal efecto Laughlin, quien era propietario de varios concesionarios de la marca Chevrolet, se valió de la ayuda del periodista automovilístico Peter Coltrin, quien era muy reconocido por los italianos influyentes de la industria. Coltrin, en consecuencia, consiguió que el prestigioso carrocero italiano Sergio Scaglietti, aceptara ser parte del novedoso proyecto.

El Corvette Italia Scaglietti Coupe #1 modelo de 1959 a su arribo a Pebble Beach, California
Adicionalmente, Jim Hall, otro conocido corredor texano, se unió a Gary Laughlin, y Carroll Shelby, con gran entusiasmo y adquirieron tres Corvettes nuevos modelo 1959, los desnudaron de sus carrocerías y enviaron los tres chasis completos (con motor y todo) al carrocero Sergio Scaglietti, propietario de Carrozzeria Scaglietti, en Maranello, Italia, para que fabricara sobre ellos una aerodinámica carrocería, en una ligera aleación de aluminio, con la intención de correr estos autos contra los Ferrari 250 Testarossas y 250 SWB Berlinettas en Europa.Como era de esperarse, el principal cliente de Scaglietti, Enzo Ferrari, no estaba muy contento y se atravesó en el camino de los norteamericanos hasta donde pudo, no sin antes observar muy bien todos los sistemas de dirección y frenado que estaban a la vista en los chasis de Corvette, para luego implementarlos, con pequeñas modificaciones, en sus propios modelos. A pesar de toda presión que ejerció el “Commendatore”, Sergio Scaglietti logró terminar a medias estos tres prototipos demorando casi tres años.

Fotografía del Corvette Italia ScagliettiCoupe #1, de 1959
El primero que se fabricó fue este de color rojo que vemos en la fotografía superior y que llegó a manos de Gary Laughlin. Este carro luego fue restaurado por Chuck Brahms para las históricas carreras de Monterrey en 1987, y desde entonces permanece como un tesoro de colección en algún lugar de Texas. Recientemente, fue subastado por la no despreciable suma de US$ 480.000ºº (ver link: http://www.youtube.com/watch?v=kaHDxpy7KDE)

El Corvette fabricado por Scaglietti seguiría la línea del Ferrari GT 250 Tour de Francia, aunque adaptando las líneas para encajar en el chasis del Corvette. En un esfuerzo por impresionar un poco, o tal vez, apaciguar a la dirección de GM, Laughlin exigió una parrilla tipo Corvette. El interior sería un hibrido pero con la suficiente cultura americana a la vista, por ello le fueron suministrados medidores Steward Warner, freno de mano con mango en T, palanca de cambios de Corvette y el clásico GT italiano, un tablero de instrumentos con acabado craquelado a propósito, asientos de cuero profundamente reforzados, timón de Corvette y unos manubrios de diseño exquisito en las puertas.
Tablero del Corvette Italia ScagliettiCoupe #1, de 1959
El carrocero Sergio Scaglietti, siempre asumió que estos tres vehículos serían carros ‘concepto’ y que lograr que tuvieran un gran desempeño en las carreras llevaría unos cuantos años adicionales de investigación, pues a pesar del ajuste y el acabado, la dinámica del modelo como tal aún no había sido resuelta. A raíz del retraso generado por las constantes intromisiones de Enzo Ferrari en el proyecto, los tres carros ya no llevarían el motor original del Corvette de 1959, sino el nuevo motor con inyección de combustible de 315 Hp,fabricado para los Corvettes modelo 1961 y esto requería ajustar el chasis y la suspensión, para poder compensar el vehículo debidamente, inclusive a pesar de que este modelo pesaría casi 400 libras menos que el Corvette original.

Fotografías trasera y lateral del Corvette Italia Scaglietti Coupe #1, de 1959
Fotografía del Corvette Italia ScagliettiCoupe #2, de 1959 - A diferencia del #1, tiene la parrilla frontal del Ferrari GT 250 Tour de France
El Corvette Italia,había sido concebido para ser producido en cantidades limitadas, pero hacia el final del proyecto, Carroll Shelby, quien por entonces vivía en Italia, una noche recibió una llamada telefónica con muy malas noticias de parte de Ed Cole, Ingeniero jefe de Chevrolet. Cole había sido reprendido por la dirección de GM y se le ordenó abandonar el proyecto, pues había mucha presión por parte del gobierno en todas las compañías de automóviles estadounidenses para reducir sus programas de alto rendimiento y de carreras. Simplemente, ninguna compañía norteamericana, en ese momento, podía hacer frente a las repercusiones que tendría ante la opinión pública que cualquiera de sus modelos insignia fuera fabricado con respaldo italiano. Lo que si es cierto es que si General Motors no hubiese declinado el proyecto, este modelo se hubiera comercializado en el mismo mercado de los deportivos europeos de alto rendimiento y en la misma escala de precios de los Ferrari y Maserati de la época.

Parte posterior del Corvette Italia Scaglietti Coupe #2, de 1959- A diferencia del #1, no tiene bumper trasero
Corvette Italia Scaglietti Coupe #3, de 1959. Al igual que el #2 tiene la parrilla frontal del Ferrari GT 250 Tour de France
Interior del Corvette Italia Scaglietti Coupe #3, de 1959
Luego del rechazo de General Motors, Shelby, lleno de entusiasmo trató de convencer a Ford y así obtener el respaldo tecnológico y el musculo financiero necesario, pero su propuesta también fue rechazada por la marca del óvalo azul. Sin embargo, poco tiempo después, Carrol Shelby fue llamado por Ford para que colaborara con de diseño y creación de nuevos prototipos desarrollando los Shelby Cobra y Shelby Mustang, ganadores en múltiples circuitos en Europa y América. De los tres carros, solo había sido completado el #1, los otros dos llegaron a Houston con las carrocerías terminadas y parcialmente armados, Gary Laughlin se quedó con el #1 y Jim Hall recibió el # 2, el cual terminó de armar en Houston. Carrol Shelby, que había ayudado a concebir el proyecto, terminó por rechazar el # 3, el cual fue vendido rápidamente a otro entusiasta y rico texano. 

Corvette Italia Scaglietti Coupe #3 modelo de 1959 color azul oscuro
Corvette Italia Scaglietti Coupe #3, de 1959, rodando por la plataforma de ganadores en Pebble Beach, California
¿ El Corvette Italia Scaglietti Coupé # 4 ?

Otros carroceros de la talla de Bignale y Pinin Farina en Italia y Ghia Aigle de Suiza, también fabricaron carrocerías especiales sobre los chasises del Corvette durante los años 1950 y 1960. Más adelante les contaremos sobre esos proyectos. Mientras tanto Luis Nájera, citado en la introducción, también mencionó durante la agradable conversación que sostuvimos en la Glorieta del Obelisco en Cali, que después de terminar las carrocerías del Cisitalia y el BMW de 1955, a las cuales tuvo acceso privilegiado el OCCCCC durante una visita realizada a su taller hace varios años, tiene en mente iniciar un proyecto que dará a luz el Corvette Italia Scaglietti Coupé # 4, un vehículo con el cual el visionario carrocero ecuatoriano desea honrar la saga que iniciaron Gary Laughlin, Jim Hall y Carroll Shelby. El Obelisco Classic Car Club Cali Colombia OCCCCC estará presente, en el taller del maestro metalúrgico ecuatoriano Luis Nájera, el día en que sea descubierta esta nueva obra maestra del automovilismo.