La Cochera Clásica de José Rafael Ortiz Coral

El Obelisco Classic Car Club tiene el honor de presentar La Cochera Clásica de José Rafael Ortiz Coral, entusiasta nacido en Bogotá pero conocido como El Pastuso, a quien sus más cercanos llamamos Rafa. La Cochera es la realización de un sueño que José Rafael tuvo cuando tenía 15 años de edad, época en la que su señora madre, doña Isabel Coral De Angulo viuda de Ortiz, predestinó parte de su existencia al obsequiarle a su único hijo varón un auto deportivo MG TF de 1954, con el que se inició en el culto a los coches históricos, tema presente en cada uno de los días de su vida. Muy temprano en 1973, cuando José Rafael debutó en el campeonato de automovilismo, ganó el nacional de marcas en un Fiat Zastava 1972 y, con sólo 2 años de práctica, alcanzó su segundo cetro consecutivo en 1974, el de campeón nacional de todas las categorías, a bordo de la Mini Cooper S 1966, época en la que también se le conoció como el Campeón de la Caballerosidad. La prolífera actividad deportiva no le impidió convertirse en un temerario y experto piloto fumigador de arrozales y algodonales en los lugares más agrestes, recónditos y remotos de Colombia. Rafa abandonó el 8º semestre de la carrera de Administración de Empresas que cursaba en la Universidad de Los Andes y, en su lugar, estudió aviación en el Aeroclub de Colombia en Guaymaral. Cuando se graduó de piloto, le tocó ejercer su carrera en el arte de dominar el aire, en la lejana población de Algarrobo, en el Departamento del Magdalena, sitio donde poco a poco comenzó a llenar su cuaderno de bitácora con miles de vuelos rasantes, para los cuales los únicos maestros fueron el riesgo, la audacia y el peligro de muerte inminente. Poco tiempo después, en el municipio de Fundación, al cual José Rafael llama con cariño “fundición”, por los calores ambientales extremos que sufren sus habitantes, dio iniciación al que sería su proyecto empresarial, con la adquisición de una modesta compañía cuyo objeto social era la fumigación aérea, la que, con extraordinaria visión y el paso del tiempo, transformó en una de las más grandes de su ramo en el país.
Interior de La Cochera. Al fondo, a la mano derecha, el Bar, donde José Rafael atiende a sus amigos
A pesar de que desde la mediana edad José Rafael, hoy cerca a los 70 años, padeció las consecuencias de un cáncer incipiente y de un aneurisma precoz, que inclusive lo dejó parapléjico por un período, fenómenos de la salud contra los cuales ha batallado sin replegarse ni un solo minuto a lo largo de décadas, el soñador se armó de un inmenso valor y con la asistencia incondicional de su esposa doña Martha Lucía Guzmán de Ortiz, amén de la dulce comprensión de sus hijas Paola Andrea y Johanna, materializó la construcción de La Cochera Clásica, al estilo de las que miman los autos de colección de los famosísimos restauradores norteamericanos Jay Leno, Walter Hill, Al Wiseman, Buddy Pepp y Chuck Higgins. Una vez terminado el privilegiado refugio de los clásicos, único que existe en Santiago de Cali, el mismo se convirtió en la meca y en el referente de los afiebrados locales, sin menoscabo del prestigio que la bóveda de estilo californiano y repleta de joyas automotrices, alcanzó en el plano nacional e internacional.
El sobrio y elegantísimo Mercedes Benz Adenauer 1958
que José Rafael adquirió de Carlos Jorge Garcés Eder
Todos los autos que se exhiben en La Cochera ocupan sitio privilegiado en el corazón de José Rafael pero, indudablemente, hay 3 coches que son sus “niños” predilectos: el Corvette 1962, un deportivo pura sangre, cuyo 1er propietario fue Enrique González Caicedo del Ingenio Riopaila; el Mercedes Benz Adenauer 1958, berlina que merece sitio de honor en el Museo Mercedes de Stuttgart y el emblemático Lincoln Continental 1948, motor V12, categoría clásico 5 estrellas, cuyo primer dueño fue el patriarca antioqueño J.B. Londoño. La exposición se complementa con el Ford Thunderbird 1956 con Kit Continental preparado por el expertísimo Omar Eljach, el De Soto 1928 ½ que atravesó SudAmérica de sur a norte bajo la conducción del aventurero Ángel María Brambilla, una réplica de la Mini Cooper 1992, pues la original que Rafa tenía se la prestó para una carrera en La Virginia al piloto Luis Fernando Cuervo, quien al iniciar la competencia se salió de la vía y murió en el acto; el Mercedes Benz 450 modelo 1972, el Chevrolet 1963 convertible que perteneció al publicista Jorge Les, el carismático Chrysler convertible 1948 y el Willys 1953 que le vendió Paulo A. Mojica Salcedo. Mientras tanto, en el taller de su confianza, el sitio que le adornó sus sienes con una variedad de canas platinadas, se están restaurando para llegar a La Cochera, no tan rápido como el quisiera, el único Lincoln 1928 que existe en el suroccidente de Colombia, permutado con don Willy Claussen Restrepo (q.e.p.d.), la Chevrolet Nomad 1957, el Ford Thunderbird 1958, un excepcional descapotable que oculta su techo en la bodega, el Cadillac Sedan De Ville sin parales 1958 y el camión Chevrolet 1954 que Rafa planea usar para trasladar sus clásicos de un lugar a otro. Otros que sueñan impacientes, al pie de La Cochera, con alcanzar muy pronto la adolescencia, son los nietos de José Rafael, los tremendos Lukas, Mateo, Martín, Joaquín y Lorenzo quienes en el futuro quemarán las llantas de los deportivos, después de tomarse una cerveza bien fría en el Bar de su abuelo. Si deseas comunicarte con Jose Rafael escríbele a jrortiz@aerosanidad.com
Ni el vuelo de las luciérnagas perturba el descanso de los Clásicos que habitan
La Cochera de José Rafael, al caer la vespertina en el sur de Cali
Visita a la Cochera Clásica de José Rafael Ortiz Coral
Aparecen durante la agradable visita realizada a la Cochera el sábado 30 de octubre, de izquierda a derecha: Fidel Uribe, Jaime Hernán Martínez Sandoval, Luis Fernando Arias, Humberto Pierotti, Alberto Silva Borrero, Carlos Hernán Marulanda Caicedo, Hugo Suárez Fiat, el anfitrión, Francisco Mejía Azcárate, José Joaquín Plata, Eduardo Ramos Garbiras, Germán Botero, Luis Fernando Durán, Ramiro y William Aragón, Carlos Adolfo Vélez, Erick Rodríguez, Luis Fernando Vélez Escobar y Leonardo Esquivel Cardona.

Coletilla


Caricatura de José Rafael Ortiz Coral por OrlandoBé