Del Drive-In al Drive-Thru

Por: Francisco Mejía-Azcárate 
Algunos aducen que el drive-in nació de la perfecta combinación entre el afán, el mal clima, y la pereza del conductor, conjuntamente con el deseo de un servicio rápido y eficiente.

En 1921 (hace ya un siglo) surgió el primer restaurante de carretera, era el “Texas Pig Stand”, especializado en barbacoa (asados al carbón), este estaba localizado junto a una muy transitada autopista en Dallas, Texas, y consistía de una cocina, rodeada de grandes ventanas, en el centro de un enorme estacionamiento, en el que se tomaban pedidos directamente en los vehículos, y cuando el pedido estaba listo se lo llevaban debidamente empacado al cliente quien pacientemente estaba esperando en el estacionamiento. En esos primeros meses, este ‘drive-in’ solo tenía la intención de brindarle una comida rápida a un cliente hambriento que debido al clima, o al afán de llegar del punto A al punto B, no pensaba bajarse del vehículo. Pero a medida que los automóviles se volvían más asequibles para las familias y, por lo tanto, más comunes, era natural que la industria de los restaurantes de carretera evolucionaran para satisfacer la creciente demanda de los alimentos para llevar.

Década de 1930 - Fotografía del Texas Pig Stand, el primer drive-in 


Pronto los directivos del “Texas Pig Stand”, se dieron cuenta que muchos de sus clientes no se llevaban el pedido, sino que empezaban a comérselo dentro de sus vehículos, entonces decidieron modificar su sistema dando paso al primer ‘drive-in’, verdadero. Los clientes esperaban en sus automóviles mientras los meseros que les habían tomado el pedido les entregaban un delicioso platillo de cerdo asado al carbón, acompañado de una Coca-Cola helada, para degustar dentro del vehículo. Lo interesante de este negocio en particular es que fueron ellos quienes diseñaron la primera bandeja que se sujetaba al vidrio y a la puerta del automóvil, permitiéndole al comensal más libertad para comer dentro del habitáculo.

Bandejas especiales para soportar el pedido

(1936) - Carpenters Sandwiches, Sunset Boulevard y Vine Street, Los Ángeles, California

El modelo ‘drive-in’ no solo facilitó las cosas para los conductores y sus familias, sino que también tenía un sentido adicional desde la perspectiva del negocio. Los propietarios de los restaurantes no tenían necesidad de tener un montaje tan formal y completo, con los drive-in tenían más gente en la cocina y empleaban menos meseros tradicionales, lo que le abrió las puertas a los estudiantes de secundaria en ese oficio. A medida que aumentaba la demanda por un servicio cada vez más rápido, la posición de los meseros se hizo más competitiva y dio lugar a tendencias reconocibles como vestirlos coloridamente y montarlos en unos patines, una tendencia que se extendió por el mundo entero.

Drive-ins típicos del sur de California en la década de 1940

Los drive-in se fueron volviendo muy populares a lo largo y ancho de los Estados Unidos, y empezaron a desarrollar otro tipo de servicios para atraer a las familias, cada vez más. Ahora no atendían solo en los vehículos, en su interior había llamativos restaurantes con largas barras y mesas en fila, baños cómodos y algunos empezaron a incluir parafernalia propia del restaurante o de las marcas asociadas al lugar. Su aspecto cambió y ahora se llamaban “DRIVE-IN DINERS”.

Rápidamente se fueron convirtiendo en ‘snack bars’ ubicados en todas las carreteras norteamericanas, muy posiblemente como respuesta a ese período de gran tristeza provocado por la 2da Guerra Mundial. Los drive-in diners se caracterizaron por su estilo de decoración único y original: pisos a cuadros, arquitectura de techos voladizos y líneas redondeadas, iluminación con luces de neón, y mesas especiales en las que aún es posible ir a disfrutar de un menú repleto de enormes platillos mayoritariamente ‘engordadores’, muy estadounidenses.

Fotografía: 1950 American Diner

La competencia era feroz y la arquitectura se hizo cada vez más llamativa e icónica, popularizándose, no solo en los Estados Unidos, sino también en los países del continente americano, así como en la mayoría de los países de Europa occidental. En Cali, por ejemplo, fueron muy populares, Oasis, Trapicana y La Flora.

Dejaron de ser sitios para ir a comer solamente, se fueron convirtiendo en puntos de encuentro donde los jóvenes podían ir a encontrarse con sus amigos, divertirse y fanfarronear con los autos de sus padres, buscando siempre una chica hermosa a quien invitar a una malteada. Indiscutiblemente, este fue uno de los primeros indicios que la cultura automotriz iba a tener un papel fundamental en el desarrollo social en muchos países durante buena parte del Siglo XX. Esto se refleja muy bien en “American Graffiti”, una película de 1973 co-escrita y dirigida por George Lucas, ambientada en la población de Modesto, California, en 1962. Es una película que estudia las culturas automotriz y la temprana etapa del rock 'n' roll, que empezaba a ser muy popular entre los primeros ‘tean agers’ de la generación del baby boom. La película cuenta la historia de un grupo de adolescentes y sus aventuras en el transcurso de una sola noche.

Fotografías ilustrativas de la película ”American Graffiti”


Con el tiempo ocurrió una evolución natural para los conductores, esa evolución era detenerse y ordenar a través de una ventana, para ahorrarles a los jóvenes meseros el tiempo que les tomaba caminar o patinar de un lado a otro entre el restaurante y los autos.

Fue así que en Los Ángeles, en 1931, una franquicia de la popular cadena ‘Texas Pig Stand’ comenzó a permitir a los conductores hacer pedidos a través de una ventana de la tienda en lugar de hacerlo directamente a los meseros en el estacionamiento, al conductor le entregaban una tabla numerada, que se adhería al coche para que fuera reconocible por los meseros. Otras cadenas pronto siguieron su ejemplo, y en 1948 se inauguró el primer ‘drive-thru’ verdadero en Baldwin Park, California. Su nombre: ‘In N Out Burger’. Dotado de un intercomunicador de última generación y la no tenencia de mobiliario alguno, ‘In N Out Burger’ cumplió al pie de la letra lo que su nombre significaba, y los clientes ‘entraron y salieron’ con su pedido, en un tiempo récord. El drive-thru había nacido.

Década de 1950: ‘In-N-Out Burger’, el primer drive-thru de los Estados Unidos

El primer ‘In-N-Out Burger’ fue una creación del ex militar Harry Snyder y su esposa Esther, abrió sus puertas en el suburbio de Los Ángeles, Baldwin Park, el 22 de octubre de 1948. Desde entonces, sirve solo sus icónicas hamburguesas, papas fritas a la francesa, Coca-Cola fría y cremosos batidos, el menú se ha mantenido prácticamente sin cambios desde entonces.

Mucho antes del primer drive-thru, la modalidad de drive-in, se extendió al cine y fue así como el 6 de junio de 1933, se abrió el primer ‘autocine’ en Crescent Boulevard, en la ciudad de Camden, Nueva Jersey. Esta genialidad fue una creación de Richard Hollingshead, un fanático del cine y gerente de ventas de la empresa de su padre, “Whiz Auto Products”, en Camden. Inicialmente se llamaron “Park-In Theaters”, el término "autocine" (drive-in theatres) se popularizó después. Los autocines con el tiempo fueron implementando restaurantes y para muchos eran lo mejor de los dos mundos.

Esta fotografía ilustra una joven dispuesta a disfrutar de un suculento menú mientras ve la película

Los autocines (drive-in theatres) fueron una sensación durante buena parte del Siglo XX

De acuerdo a un estudio realizado por la Universidad de Princeton, los restaurantes de comida rápida obtienen alrededor del 70% de sus ingresos anuales a través del carril de autoservicio: para 2021, se espera que el gasto total en comida rápida en los Estados Unidos, alcance los US$ 223 mil millones.

Adicionalmente este estudio mostró otros datos curiosos como estos tres que se enumeran a continuación:

1- La cantidad estimada de gasolina que se desperdicia cada año por los automóviles que están inactivos en los carriles de los diferentes drive-thrus de los Estados Unidos es equivalente a más de 4 millones de galones, razón por la cual los científicos continúan estudiando cómo hacer que los drive- thrus sean más eficientes y se desperdicie menos combustible.

2- El estadounidense promedio gasta actualmente más de US$ 1.200 cada año en comida para llevar.

3- Entre las dos y las cinco de la tarde es el mejor momento para buscar un buen servicio en un drive-thru porque el agite de la hora de almuerzo ya ha pasado, y posterior a las 5 de la tarde las cosas empiezan a complicarse porque muchos deciden detenerse a comprar la cena en su camino a casa.

Un Mc Donald’s británico y su concurrido drive-trhu


Aunque normalmente pensamos en los drive-thru en términos de comida, hay muchos otros servicios de los que el ciudadano puede beneficiarse desde la comodidad de su automóvil (especialmente en los Estados Unidos), algunos de estos servicios con drive-trhu incluyen una cita para hacerse la prueba o vacunarse contra el Covid-19, trámites bancarios, droguerías, licorerías, iglesias.

La santa misa también se acogió a la cultura automotriz desde los años 40’s en los Estados Unidos

Sin embargo, las más ‘locas’ son las que presentan algunas salas de velación que tienen sus propias cabinas donde está expuesto el fallecido, así los deudos y los amigos de este pueden ‘pagar sus respetos y hacerle una corta oración’ sin necesidad de bajarse del vehículo, aunque también existen capillas para bodas, estas últimas introducidas en Las Vegas a mediados de la década de 1970.



Ya en Siglo XXI, los drive-thrus, habían desplazado por mucho a los Drive-ins, sin embargo, los drive-ins revivieron y están convirtiéndose en una opción nuevamente a causa de la pandemia del Corona Virus, pues como la gente no se siente segura en un restaurante ha resuelto volver a las épocas pasadas y comer en la privacidad de su coche. Esto lo que nos demuestra es que los drive-ins y los drive-thrus son una pieza icónica de la cultura estadounidense que se extendió por buena parte del mundo.

Los drive-ins han ido resucitando debido a la pandemia del Covid-19

Yo me pregunto… ¿Habrá un drive-thru más reconocible que aquel que muestra los enormes ‘Arcos Dorados’ de McDonald's? Lo dudo. Amantes de la comida abundante, la comodidad y la conveniencia de un servicio eficiente, los ‘gringos han logrado el más alto nivel en el área de las comidas rápidas, y tanto los drive-ins como los drive-thrus terminaron convirtiendo nuestros coches en incómodos comedores en casi todo el mundo.

Seguramente en el futuro cercano los vehículos de conducción autónoma proporcionarán mayor facilidad para comer mientras se conduce, cuando estos se vuelvan verdaderamente populares.