Por: Francisco Mejía-Azcárate
El Chevrolet Monte Carlo se introdujo en 1970, en pleno apogeo de la era de los autos musculosos que por entonces se había tomado a las automotrices estadounidenses. Posicionado como un automóvil de lujo personal, con altas prestaciones, el Chevrolet Monte Carlo competía con sus ‘parientes’ de GM, Pontiac Grand Prix y Buick Riviera, por su propio lugar en el mercado de autos ‘musculosos’ para caballeros. Sin embargo, justo después de su introducción, la moda de los autos musculosos cayó en desgracia, dada las nuevas políticas de regulaciones ambientales impuestas por Washington, y la enorme presión ejercida por las compañías aseguradoras, por lo que su vida como ‘auto musculoso de lujo personal’ tuvo una vida más bien efímera, terminando casi tan pronto como había comenzado.
1970 Chevrolet Monte Carlo |
Tras el tremendamente exitoso rediseño del Pontiac Grand Prix en 1969, Chevrolet presentó el Monte Carlo año modelo 1970, el 18 de septiembre de 1969, pero su recepción fue menos que cálida de parte de la prensa especializada que todavía se debatía entre cual era el mejor ‘muscle car’ del momento. Sin embargo y a pesar de la apatía de la prensa y las revistas especializadas, el Monte Carlo, que se ofrecía como un cupé de lujo de dos puertas que podía sentar cómodamente cuatro a personas, fue un éxito de ventas, poniendo en el mercado 145.976 unidades. Técnicamente, el Monte Carlo estaba basado en el muy exitoso Chevelle, pero tenía una distancia entre ejes de 116 pulgadas, en lugar de 112, y tenía el capó más largo jamás instalado en un Chevrolet.
Todos los Monte Carlo salían de la planta de ensamblaje con al menos un motor V-8 “Turbo Fire” de 350 pulg³ (5.7L), pero cualquiera de los motores de bloque grande (402 y 454) destinado a los Chevelle, estaba disponible. Mientras que el Chevelle SS estaba dirigido a un público más joven, el Monte Carlo SS, que con todas las opciones costaba US$ 5.012, buscaba un comprador más maduro - (Casi US$ 1.000 más que el Chevelle).
1970 Monte Carlo - Motor V-8 de bloque grande, LS5 de 454 pulg³ (7.4L) (360 HP) |
En la parte más alta de la gama, incluyendo las mejores prestaciones, estaba el Monte Carlo SS 454, del que se vendieron 3.823 unidades en 1970, y 1.919 unidades en 1971. Este venía con el poderoso motor V-8 de bloque grande, de 454 pulg³ (7.4L). El paquete SS 454, opción Z20, incluía el motor de 454 CI, una suspensión de servicio pesado, el distintivo "SS 454" en alto relieve en un bonito y fino bisel, de fondo negro, localizado a lo largo de los paneles inferiores, (esto se trasladó a 1971, mientras que un pequeño emblema SS se agregó al panel trasero ese año), un espejo deportivo con control remoto, batería (acumulador) de alta resistencia, extensiones cromadas de los escapes dobles, ruedas Firestone G70-15 Wide Ovals con una franja blanca GTO 15B, de 9.6 mm en la pared lateral. Los compradores podían optar por rines Rally ZJ7 de 15 x 7 pulgadas (calzadas con los mismos neumáticos con franjas blancas). El interior de los SS 454, tenía la opción de asientos divididos (bucket seats) y una elaborada palanca montada en el piso sobre una consola central.
Fotografías que enseñan la parte posterior y el interior del 1970 Monte Carlo |
Para el año modelo 1971, los rines Rally ZJ7 de 15 x 7 pulgadas se convirtieron en estándar para el Monte Carlo SS. El control de nivel automático para la suspensión, constaba de una bomba de compresor, una válvula de nivelación trasera, amortiguadores de aire traseros y los correspondientes protectores de la línea de aire de cada amortiguador. Funcionaba estrictamente con el vacío del motor, que primero se enviaba a la bomba de un compresor montado sobre la parte superior del guardabarros delantero izquierdo, para luego distribuir la presión de compensación a través de la válvula a los amortiguadores de aire, aunque ocasionalmente sobrecargaba los amortiguadores traseros (solo un poco) sin tener ningún peso adicional, proporcionando inadvertidamente una ligera inclinación, situación que era corregida por garantía, en el concesionario.
1971 Chevrolet Monte Carlo SS 454 |
A pesar de su aguerrido rendimiento y escasez, porque a decir verdad, no hay muchos sobrevivientes, los Monte Carlo Super Sport, han sido durante mucho tiempo corpulentos autos de alto rendimiento que han estado por fuera de la mira de los coleccionistas. Por alguna incomprensible razón nunca se tuvieron en cuenta a la hora de conservarlos y la gran mayoría se desecharon como cualquier viejo Chevy, afortunadamente, las alarmas se han prendido y los pocos que quedan se han convertido en ‘hot items’.
Un paréntesis con un poco de historia: Para muchos historiadores, el segmento de automóviles de lujo personal realmente nació con el extraordinario Continental Mark II (1956/1957), diseñado por John Reinhart y Gordon Buehrig, pero su corta vida no le dio tiempo a que se acuñara el término “lujo personal”, ese segmento, más no aun el término, nació realmente con el Ford Thunderbird, cuando en 1958, fue rediseñado y pasó de ser un automóvil bi-plaza a un automóvil de cuatro plazas. Estos cambios modificaron el énfasis del Thunderbird de ser un auto netamente vistoso y deportivo, a ser un cómodo, lujoso, atlético y llamativo automóvil, elevando las ventas en un 50%. La competencia notable de GM no llegó sino hasta 1963, cuando Buick lanzó el modelo Riviera. Sin embargo, la revista especializada Hemmings Motor News, dice que quien empezó todo fue el Cadillac Eldorado, que comenzó originalmente diseñando versiones ultra premium de bajo volumen de los modelos Cadillac de menor precio, a partir del año modelo 1953, incluido el Cadillac Eldorado Brougham 1957/1958 de cuatro puertas que fuera construido a mano.
Independientemente de que marca o qué modelo gestó el segmento de automóviles de lujo personal, ya para mediados de la década de 1960, Oldsmobile, había roto los esquemas con su radical Toronado de tracción delantera, y Cadillac hizo lo mismo un año después con un Eldorado rediseñado. Incluso el famoso Grand Prix de Pontiac se sumó a esta fiesta, mientras que “Madre Mopar” puso sobre el tapete el elegante Chrysler 300, y vistió de gala a sus primos Dodge Monaco 500, y Plymouth VIP. Solo una de la marcas notables faltaba en esta encopetada fiesta de automóviles de lujo personal, y ese era Chevrolet; es decir, hasta la introducción en 1970 del Monte Carlo, la marca del corbatín no había presentado nada tan notable, desde el Impala SS de 1965, que era visto más como un auto familiar y no un auto de lujo personal.
1971 Chevrolet Monte Carlo SS 454 |
Aunque solo se ofreció en los años modelo 1970 y 1971, (reintroducido en los años ochenta), los aficionados a los musculosos en la actualidad están empezando a cruzar esas intangibles líneas que los tenían en el ostracismo, y están empezando a clasificar al Chevrolet Monte Carlo SS 454 en lo alto de esa corta y exclusiva lista de autos de lujo personales que promocionaron el rendimiento en toda su esencia.
Interior del 1971 Chevrolet Monte Carlo SS 454 |
Dejando en claro que el rendimiento era un elemento muy importante en el Monte Carlo SS de 1970, todos los de ese año fueron ensamblados con la versión LS5 del motor V-8 de 454 pulg³ (código de sufijo CRN) como equipo estándar, con compresión 10.25:1, un carburador Quadrajet de cuatro bocas y un árbol de levas de levantamiento hidráulico orientado netamente al rendimiento, produciendo 360 HP y 500 lbs.ft., de torque. Para la edición de 1971, el motor V-8 LS5 (código de sufijo CPD) se puso en servicio una vez más, excepto que las famosas regulaciones gubernamentales con respecto a las emisiones y a los tipos de combustible forzaron efectivamente la reducción de la compresión. Sin embargo, incluso a 8.5:1, Chevrolet se las arregló para encontrar 5 HP adicionales, llevándolo hasta los 365 HP, tal como lo anunciaba su publicidad.
1971 Monte Carlo - Motor V-8 de bloque grande, LS5 de 454 pulg³ (7.4L) (365 HP) |
Aunque este número puede parecer sospechoso, una investigación más detallada sugiere que la calificación de 360 HP para el año modelo 1970, pudo haber sido demasiado conservadora a propósito. El más potente LS6, con sus elevadores sólidos y carburador Holley, no se ofreció en el Monte Carlo en 1970, pero se cree que alrededor de 10 salieron de fábrica con el motor LS-6 454, con una potencia de 450 HP, en 1971. También se rumora que se fabricaron unos muy pocos Monte Carlo SS 454 con caja mecánica de cuatro velocidades, y es que Chevrolet limitó la transmisión del SS 454, a una sola opción, se trató de la Turbo Hydra-Matic 400. Una confiable transmisión automática de tres velocidades con una relación de 2.48:1 en la primera marcha, esta unidad es conocida desde hace mucho tiempo por manejar un par elevado con facilidad, y porque profesionales experimentados pueden reconstruirla fácilmente si llegara a ser necesario.
1971 Chevrolet Monte Carlo SS 454 |
Si bien muchos sueñan con encontrar un Monte Carlo de estos, según el “First Generation Monte Carlo Club”, no ha surgido ninguna prueba documentada de tal construcción, pero antiguos trabajadores de la planta de Flint, Michigan, donde la mayoría fueron ensamblados, afirman haber trabajado en ellos, por lo que la expectativa crece y los cazadores, y tasadores están alerta buscándolos.
Apenas terminando el año 2020, un muy buen Monte Carlo, es estado impecable podría adquirirse por una cifra que rondaba desde los US$ 40.000 hasta los US$ 50.000, mientras que un Chevelle en el mismo estado con especificaciones similares (automático, LS5) se acercaban a los US$ 80.000. Es probable que un Chevelle tenga un rendimiento ligeramente superior, debido a una distancia entre ejes más corta y un menor peso en vacío, pero la diferencia de precio probablemente se deba más a la influencia que este tuvo en su momento y que ha perdurado en la mente de los compradores de este tipo de vehículos. Y es que cuando alguien se refiere a un ‘muscle car’ de Chevrolet, el Chevelle inmediatamente viene a la mente; el Montecarlo no. Pero eso está cambiando.
En enero de este año (2021), un Monte Carlo SS 1970, ganador del AACA Senior Grand National, se vendió en Kissimmee, Florida, durante la subasta de Mecum por US$ 100.100. Esta venta rompió todos los precios previos de un Chevrolet Montecarlo, en una subasta. Seguidamente, en la subasta de “Muscle Car City” de ‘Mecum Auction’, una semana después, el martillo cayó en US $90.200 por un Montecarlo, modelo 1971 ligeramente modificado, lo que indica que los autos Monte Carlo, están despertando el interés de los coleccionistas.